en blanco y negro

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21 de enero de 2014

Papá jugando al guiñote con mi hermano


1 comentario:

  1. Estuve en Huesca un par de semanas. Ese día, jugaron papá y Jesús. Pasábamos las tardes jugando unas partidas al guiñote. Él pasaba un buen rato. Se rompía la monotonía de los días.
    Cuando tocaba bajar persianas, a las seis de la tarde, sacaba la baraja y le retaba a jugar unas cuantas partidas.
    Hubo días en que me tuvo contra las cuerdas. Otros de empate. Alguno de buenas jugadas en que salí triunfante.
    Anotaba los resultados en un papel, poniendo una estralla al ganador.
    Contar y pensar era distraido.

    Por la mañana, tras el desayuno, tocaba repaso de prensa.
    Después de comer, de relajo, viendo informativo y predicciones del tiempo atmosférico. Después los documentales, que a él le entretienen y gustan.

    También tuvo sus momentos de dibujo y pintura.

    Hice otras fotografías que iré desgranando en este nuevo espacio.

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